viernes, 5 de noviembre de 2010

Un join letal

Llegué a mi casa y tomé una larga siesta. Me levanté a las 6:00 en punto y escuché que alguien me silbaba afuera. Me asomé a la ventana y era Mathe, venía en una camioneta grande y polarizada, me dijo que bajara para que empezáramos temprano la rumba. En la camioneta todo estaba muy tenso, entonces para romper el hielo, quise preguntarle a Mathe que si Luchin venía, pero al parecer eso sólo calentó más las energías, porque me respondió con unas palabras algo irónicas: "¿Y es que conmigo no te basta?". Decidí irme callado todo el camino y observar la extraña actitud que Mathe continuaba teniendo después de la última conversación que tuvimos juntos. La persona que manejaba la camioneta me inquietaba mucho, pues nunca lo había visto, podría ser un amigo de Mathe nuevo o muy viejo, y cuando Mathe notó que yo estaba observando a este sujeto dijo en voz alta: Tranquilo Chaval, es un pelado de bien.

Por fin llegamos a la casa de eventos que teníamos tan abandonada. Mathe entró y yo lo seguí pero el chofer se quedó cerrando la camioneta. Nos ubicamos en una mesa y observamos el mercado que había esa noche, bueno en realidad quien miraba era Mathe, pues a mí no me interesaba en ese momento nada que no se relacionara con él y su misteriosa vida. De repente Mathe vio un ganado nuevo y me lo dijo al oído, esta vieja se ve que tiene un carácter fuerte. La invitamos a sentarse con nosotros y en ese momento entró el chofer acompañado de un cucho muy extraño que lucía como un extranjero. El chofer se sentó y empezó a disfrutar de una charla poco profunda con la nueva puta. Su nombre era Edna tenía un pelo largo y como bien sospechamos un carácter demasiado fuerte. Dejé de preocuparme por lo que decía ella y noté que Mathe había perdido sus ganas de estar con una de ellas y de llevárselas a un cuarto. Mathe estaba muy extraño porque ni siquiera se atrevía a tocarles las manos o la cara y eso me estaba pareciendo más raro que todo lo que había estado pensando en esos días atrás. Mi mirada se perdió en el horizonte y mientras nuevamente volvía a tener esos pensamientos que me enloquecían, ví que ese cucho que entró con Samuel no dejaba de observarnos. Estaba en un mesa justo al frente de nosotros y miraba y miraba sin disimulo alguno, me inquitaba porque no sabía que era lo que ese sujeto quería. Espontáneamente se paró y empezó a caminar hacia nosotros, observé como daba cada paso hasta que se acercó a nuestra mesa y le puso la mano en el hombro a Edna, mientras extrañamente la llamó con el nombre de Carolina. El viejo la miró fijamente y descubrió que ella no era quien en realidad estaba buscando, se sonrojó e intentó irse de regreso a su mesa, pero Mathe le dijo que se quedara hablando con nosotros. Hablamos durante 30 minutos más y como estábamos aburridos nos fuimos para el parque.

Cuando llegamos al parque yo me bajé con Mathe y Edna mientras el chofer y el Viejo se quedaron en la camioneta. Llegamos directamente a buscar al Gringo quien se encontraba ocupado y nos atendió pasados unos cuantos minutos. Cojímos la mercancía y nos montamos de nuevo a la camioneta de Samuel. Fuimos a la casa de Fransuá un viejo amigo de Mathe que estaba de viaje con los papás y le había dejado las llaves a cargo. Se inició la rumba al ritmo del humo y unos cuantos plones que prendieron la alegría. El viejo miraba de un lado a otro y empezamos a ofrecerle de todo y él a aceptarnos todo, así que la cosa se estaba prendiendo. EL viejo me preguntaba muchas cosas y yo no sabía que inventarle así que le conté la verdad de cada uno de nosotros, al fin y al cabo en esa traba, esa borrachera y ese estado no creía que pudiera recordar nada al otro día. Nos dieron las 6 am y tuvimos que regresar a la casa de eventos para dejar a Edna. Cuando llegamos, El viejo y Edna se quedaron en la casa de citas con otros amigos que nos habían llegado más tarde a la cita. Se acostaron a dormir y no supe que más pasó ese día.

Pasaron varios días y no volvimos a ver al viejo rondando por el barrio ni por la casa de las citas, hasta que una noche cuando estábamos en el parque sentimos que alguien no nos quitaba la mirada de encima, miramos de un lado a otro y sólo observamos un man que nos veía fijamente. Estaba sentado en la tienda de aluminio donde a veces pasábamos la traba y se veía como inquieto. Lo miré fijamente y pareciese que lo hubiera llamado con mi mirada. De repente empezó acercarse hacía donde nosotros, hasta que llegó a donde “el gringo” y le pidió un barítico. Todos los que estábamos en ese momento lo miramos extrañamente, pues nunca nadie había llegado antes así pidiendo mercancíaa de un momento a otro. EL man se veía muy viejo y de tanto mirarlo se me hizo conocido, entonces lo reparé bien y recordé que era el cucho de la casa de citas. Luchín se puso muy agresivo, se metió la mano al bolsillo para cogerse su puñal y se le aventó al cucho para agredirlo. Estaba en nuestro territorio y aquí no llegaba ningún extraño a meterse de la nada, ni mucho menos un cucho bien vestido. El viejo se asustó mucho y trató de calmar a Luchin, pero en ese momento “El Gringo” le sujetó rápidamente la mano para que no hiciera nada. El viejo dijo que venía de parte de Edna y que sólo quería un bareto, entonces todo fue diferente, “El Gringo” calmó todos lo ánimos y le vendió el bareto al cucho. Él lo prendió y se lo empezó a fumar y con el paso de los segundos lo empezamos a meter en el ambiente del parque. Pasaron varios días y el viejo ya era uno de los nuestros y le hablábamos de las cosas, aunque a Luchín siempre le dio mucha desconfianza.

Pero misteriosamente un día el cucho no llegó a la misma hora de siempre, ya eran las 4 pm y no aparecía. Luchín también se estaba demorando y entonces Mathe y yo decidimos relajarnos y prender el primero del día. De un momento a otro escuchamos a Luchín llamándonos desde al lado del árbol que quedaba en el lado izquierdo de la cancha de futbol. Salimos corriendo y cuando llegamos allá vimos a Luchín acorralando al cucho. No sabíamos que pasaba y tratamos de calmar a Luchín, entonces el nos contó que el viejo nos estaba jugando sucio. Nos estaba tomando fotos desde esa esquina del parque. Tratamos de preguntarle por qué lo hacía pero no supo darnos una buena explicación, entonces a Luchín le entró un impulso muy fuerte y e clavó el puñal en el pecho. Mathe salió corriendo rápidamente, pero cuando yo reaccioné traté de correr y ya era demasiado tarde, el cucho estaba en mis manos y yo tenía todo el cuerpo lleno de sangre, en ese momento llegaron los policías y uno me dio un batazo en el cuello. Me quedé paralizado después de ser víctima del gobierno fatal que nos ejerce y cuando recobré nuevamente mis sentidos naturales estaba en un celda. No sabía como, ni cuando me habían encerrado, pero me preocupaba mucho por el cucho.
Sorpresivamente después de levantarme de la cama tiesa de la celda, ví que Mathe estaba afuera esperando la hora de visita para verme. Mathe entró y me trajo dulces y un par de cartas. Así sucedió durante los siguientes días mientras decidían mi futuro legal, pues nadie daba respuesta de lo que había pasado conmigo ni con el cucho y lo que parecía era que me estaban culpando de intento de homicidio. El fiscal estaba de vacaciones y no había quien iniciara la investigación por lo cual me demoré mucho tiempo en la cárcel. Mathe me visitó todos los días a la misma hora y un día tuvimos un diálogo muy importante:

- Ve Samir ¿vos qué pensás de tantas visitas ?-

-No sé tal vez también soy como tu hermano, así como Luchin.-

-No seas tan superficial mirá las cosas desde más adentro, todo tiene su razón su interés, su gracia, pensálo. Recordá, tu preguntadera en el parque, mi interés por vos, que ya no puedo estar con las tía porque no tengo ganas y todo eso. ¿No, se te viene nada a la cabeza?.

-No sé, dejáme pensarlo...-

-Samir no seas tan ciego abrí tus ojos que yo hago muchas cosas por vos y nunca te he dejado solo, mirá bien todo-

-Pues no sé, es muy confuso, se da para muchos pensamientos-

-Yo soy diferente vos me enseñaste muchas cosas y mi deber es cuidar de vos-

-¿Cuidar de qué forma?-

- De la más cercana entendélo bien-

- ¿Querés que te explique mejor?... vos ahora sos más que mi amigo y mi hermano...-

-¿Qué?-

-Si samir sos mi todo y voy a venir a visitarte hasta que salgas de acá y podamos estar juntos.

-No entiendo muy bien las cosas. Yo si tuve muchas confusiones por un tiempo pero nunca pensé que eso fuera así. Es más creí que eran muchas alucinaciones y que mi mente me estaba jugando una mala pasada. Dejáme pensar las cosas que quiero despejar la mente volvé mañana porque ahora no me siento muy bien. -

-Está bien, tomálo como querás pero entendé que lo que te digo es sincero-

Ese día estuve de nuevo pensando toda la noche.

Al día siguiente me llamó temprano el juez para acudir a la audiencia, porque el fiscal por fin había terminado la investigación y el juez ya había dictado el juicio. Soy culpable... De venta ilegal de sustancias alucinógenas, consumo de drogas, de portar más de la cantidad permitida y lo peor de un intento de homicidio que nunca hice. Mi condena es de 20 años y si colaboro se reduciría a la mitad. Ese día cuando llegó Mathe le conté de mi condena y de lo mal que me encontraba por haber sido acusado por el intento de homicidio del cucho, le dije que por portar esos baríticos en el bolsillo habían sacado tantas conclusiones erradas de mi destino, inmediatamente noté como su gesto de felicidad se desvaneció en el viento. Se alejó de mí, me dio un beso en la mejilla y me dijo adiós....... Se fue rápidamente y tuve mucho miedo de no volver a verlo.

Pasaron 2 semanas y Mathe nunca regresó nunca supe que pasó ni porque se alejó, solo logré entender un tiempo después que lo nuestro era extraño, que existía y que los dos lo sentíamos porque ni en un solo momento había dejado de pensar en él.

miércoles, 27 de octubre de 2010

revelación final.

Y esa noche llegué de nuevo a la soledad de mi cuarto donde la única bulla que escuchaba era la voz de Lorenzo repitiendo las mismas frases de siempre. De nuevo mi cabeza se encontraba pensando más allá de lo que debía; ¿será que esa relación entre Luchín y Mathe era solamente una amistad? Y si era así, entonces ¿Por qué siempre entraban juntos a comerse a las putas? ¿Por qué siempre estaban juntos, sábados, domingos, festivos y los pocos momentos que les quedaban entre semana después de salir de la universidad? ¿Por qué Mathe siempre pensaba en el bienestar de Luchin, en si tenía buena hierba o si se encontraba cómodo? ¿Por qué me importaba a mí esto, si simplemente ellos eran un par de amigos para mi?

Era una noche difícil pues creo que con tantas preguntas que le hice a Mathe lo estaba cansando por eso salí corriendo apenas me sentí en apuros y ¡qué apuros! Mathe estaba dudando de mi sexualidad, hasta yo mismo estaba empezando a hacerlo. Dudaba de mi continua atención hacia Mathe de mi repetitivo interés hacia como estaba él y dudaba de Mathe porque él en ocasiones me trataba como su buen compañero leal. Entonces estaba confundido no sabía si Mathe era lo que yo sospechaba, no sabía si yo era quien siempre pensaba y no sabía si yo quería a Mathe. Estaba inquieto y muy estresado porque desde que vi por primera vez a Mathe brindándome gotas en la universidad, noté una química extraña entre los dos, un no sé qué siempre me impulsó a estar más cerca de él. Sus ojos en cada viaje que nos metíamos me observaban profundamente y estaba casi que seguro que entre los dos pasaba algo muy extraño e inexplicable. Sus palabras de aliento, su preocupación, sus ganas de meterme siempre en el cuento para que ya no me sintiera solo, todo eso me creaba más dudas y al mismo tiempo hacía que me acercara más íntimamente a él. Traté de dormir de nuevo y de tanto pensar cerré los ojos hasta que sin saberlo me dormí profundamente.

Al otro día estaba decidido a ver de nuevo a Mathe para preguntarle muchas y de pronto decirle lo que sentía pero me daba miedo pensar en su reacción. Entonces me fui directo a la portería de la casa de Mathe, le silbé para que saliera y esperé unos minutos mientras bajó las escaleras. Salimos de nuevo al parque pero ese día yo estaba dispuesto a no fumar ni un solo cigarrillo en el día. Hablamos un rato de nuestras cosas hasta que él me volvió a preguntar por lo que me pasaba el día anterior y entonces en ese momento tuve la valentía de confesarle todo lo que atravesaba por mi mente.

- Mathe la verdad es que siento que las cosas entre nosotros son diferentes. Vos sos muy atento conmigo y en ocasiones especial, me ayudás siempre, buscas que me sienta cómodo en todo momento y eso es extraño. –

-¿A qué te referís? ¿cómo extraño, si yo soy muy normal?-

- ¡Ya!… Chaval no digas nada más, vamos, ya sé lo que te pasa. Se te está pasmando la mente por tanto humo viejo. Mejor andate a tu casa y nos vemos en la tarde para visitar mis tías que las tengo abandonadas-

-Todo bien parce, nos vemos más tarde-




martes, 19 de octubre de 2010

Pensar, Hablar, Fumar




1. EXT. GRADERÍAS PARQUE. NOCHE.

La bicicleta de Samir está sobre el prado en frente de la gradería, Samir,20, con jeans negros camiseta blanca y ancha, se  sienta sobre las gradas. Saca un cigarrillo del canguro que lleva en la cintura, lo coloca en sus labios y lo enciende. 


2.EXT.GRADERÍAS PARQUE. NOCHE.

Sobre la gradería están cinco colillas de cigarrillo. Mathe silba mientras se acerca a Samir.

MATHE

(Agitado)

Qué más Chaval, Qué cuenta

SAMIR

(Pensativo)

Todo bien ahí con algunos problemitas.

MATHE

¿Aburrido?

SAMIR

No, más bien confundido.

MATHE

¿Y eso?

SAMIR

Nada bobadas, parce cosas sin importancia mejor vamos a darnos una vueltita y compramos hierba.

MATHE

(Alegre)

Uy si eso me suena bastante.


2. E3. PARQUE. SENDERO PEATONAL. NOCHE

Los ojos de Samir están perdidos en el horizonte. Mathe camina al lado izquierdo de Samir, a su lado derecho lleva la bicicleta. Samir y Mathe se acercan al sube y baja del parque donde está el “Gringo”.


GRINGO

(Con la lengua trabado)


¿Qué más mono?


MATHE


Bien gringuito, qué me tiene para hoy. Necesito algo bien bueno para animar al pelao


GRINGO


(Con la lengua trabado)

Le tengo R , periquito, baretica regular y cripi

MATHE

No, no hay nada. Conseguime un cuarto de cripaja.

GRINGO


(Con la lengua trabado)

Todo bien, usted sabe que aquí se le atiende como príncipe.


Mathe recibe la mercancía y avanza con Samir hacia las bancas del parque.



4. EXT. PARQUE. BANCAS. NOCHE.



Mathe y Samir están sentados en las bancas blancas de madera del parque, al lado de la cancha de futbol. Mathe sujeta con sus manos la bolsa transparente de la hierba y le pasa un poco de está, Samir la limpia. Mathe saca de su bolsillo derecho de la billetera un par de cueritos. Recibe la hierba qué Samir limpia y arma los cigarrillos.



MATHE


¿Lo querés cargado o simple como siempre?


SAMIR

(Pensativo)


No, hoy dame una dosis mayor qué me siento como dormido.


MATHE


Todo bien, parce prendámoslo y me cuenta que es eso que le pasa.


SAMIR

(Pensativo)


Hágale, hágale sin mente.

Samir sujeta el cigarrillo con la mano derecha, lo lleva a la boca, con su otra mano coge el encendedor y lo prende. Mathe fumada después de Samir. Samir bota el humo lentamente.



SAMIR

(Pensativo)


Tío, ¿vos sos muy parcero de Luchin cierto?


MATHE


Si, ¿Por qué?, ¿tenes algún problema?


SAMIR


No, parce para nada, relájese. Solo que he notado que pasa mucho tiempo a su lado.


MATHE.


Pues es que él es como mi hermano.


SAMIR


Y además de estar fumando y visitando las casa de citas, ustedes ¿qué más hacen?


MATHE


Parce que es esa preguntadera, le incomoda algo de Luchín


SAMIR


Qué no, Tío. Solo que me extraña que pase tanto tiempo con él.


MATHE

(Exclama)


Parce usted es que tiene celos de Luchín o que,  no pelado ¡se me está cambiando de bando!


Una risa nerviosa sale de la boca de Samir


SAMIR

(Apenado)


No, Tío como se le ocurre, que tal yo tirándole los perros a usted


MATHE


Sabe qué, parce mejor cuénteme eso que lo tiene como pensativo.


SAMIR


No viejo a lo bien qué es una bobada.

Mejor sabe que, yo lo dejo que me está como jodiendo la cabeza


MATHE


Todo bien pana termínese esa patica y se pisa.

domingo, 17 de octubre de 2010

Secreto del corazón

Y si era poco normal que podía hacer en ese entonces para mostrarme como alguien común. Pues nada mi propio ser me exigía ser diferente y ahora que pienso en mi vida nueva, en todos estos días que he compartido al lado de Cofla y Mathe recuerdo mi infancia incomprendida y mis días de soledad al lado de Lorenzo y sus pocas frases. Entonces se vienen a mi mente miles de sentimientos encontrados y pensamientos que me hacen ver las cosas de otra manera. Tal vez ya no estaba más solo, había encontrado una nueva familia en la calle y ellos eran mis amigos, pero no entendía aún muchas cosas. Ese miedo inesperado en la casa citas y el hecho de no haber querido hacer nada con ninguna mujer me estaba retorciendo el cerebro cada segundo que pasaba. Y Morticia con sus labios grandes y esos gestos que en ningún momento me excitaron, mis ganas ilimitadas de siempre estar al lado de Mathe, todo eso me estaba rondando por la cabeza y me sentía muy extraño no sabía en realidad que era lo que quería que pasara más adelante. De pronto cierro los ojos y veo a Lucho y en su traba y Mathe de nuevo relajado en el parque, hablando de esas hembritas ricas que se había comido, y para mí todo estaba empezando a ser muy incómodo.

Sera que mi mente me estaba jugando una mala pasada, pero intentaba dejar de pensar en ese no se que, que me estaba incomodando, pero vuelve y vuelve y espantó por completo mis ganas de hablar con un muerto, un muerto que me diga algo sobre mis padres algo que me devuelva esas ganas verdaderas de vivir sin consumo porque tenía que aceptarlo, en ese momento mi vida era la droga. Definitivamente lo mejor que pude hacer por ese día fue volver a buscar a Mathe en su casa para seguir con la misma rutina de siempre. Entonces llegamos al parque y empezamos a consumir esa maravilla explosiva, pero para mí esa vez no fue como antes, sentí cambios extraños en mi cuerpo y no volé tan alto como las otras veces. La mirada profunda de Mathe me incomodaba seriamente, sus palabras y el movimiento de su cuerpo me estaba estresando, sus dedos moviéndose de un lado al otro, su labios, sus ojos, sus manos lo estaba observando demasiado y no quería mal entendidos, o tal vez ese era el malentendido que me tenía tan inquieto?. No sabía si eran efectos de la traba o si simplemente ya me había embombado así que tuve que excusarme y salir rápidamente del parque, le dije a Mathe que mi abuela estaba muy mal sólo para no confesarle que me sentía muy incómodo en ese instante. Caminé observando todo a mi alrededor y la gente me miraba me señalaba necesitaba estar ya en mi casa en mi cuarto durmiendo.

Cuando llegué no había nadie en la casa, me recosté a relajar la mente pero todo de nuevo era más confuso, recordé lo sucedido en la casa de citas, mi extraño comportamiento ante las mujeres, mis ganas e interés de siempre estar al lado de Mathe, el hecho de haberlo esperado en la casa de eventos sabiendo que me sentía incómodo, saber que me causaba rabia que le prestara más atención a Luchin que a mi, querer siempre impresionarlo y demostrarle que si sé de muchas cosas, eran recuerdos que me torturaban sin cesar. Será que desde esa primera vez que esa niña me rechazó, perdí todo mi interés en el amor? Pero si en este momento el único amor que recibía era el de Lorenzo, con quien ya casi nunca compartía y el de Mathe quien me cuidaba como su nueva pertenencia. Entonces ese amor era la causa de todos mis problemas en ese momento. Mi confusión no se pudo aclarar entonces en ese momento ya se me había despejado un poco la mente así que pude descansar por un buen tiempo.

viernes, 15 de octubre de 2010

La Esencia

-Sigues siendo fiel a esa esencia que te hace ser, que te muestra las maravillas existentes entre un sabor y olor, te da la oportunidad de conocer más a fondo la esencia de cada ser y elemento que habita en el planeta. Antonieta ahora que te conozco y que se de tanta frustración que cargas en tu espalda te pido que no renuncies a ser quien eres porque las pequeñas particularidades son las que no hacen diferentes en el mundo y yo sé que hay muchos hombres que conocen tu belleza inmensa.
-Pero papá, no ha sido fácil vivir en un mundo donde no hay lugar para la diferencia-
-Lo sé hija, pero sé también si algún día tu madre logró amarme con la misma carencia que tienes tú, alguien podrá amarte a ti también.-
-¿A qué te refieres con eso? ¿A ti también te faltan dos sentidos?-
-No me faltan, mi hijita linda, porque nunca me acostumbré a necesitarlos o extrañarlos. Sólo viví mi vida cada segundo saboreando cada olor, color, textura y aroma, disfrutando de la forma en que mis miles de papilas se balanceaban de un lado a otro y armaban una tremenda fiesta en mi boca cuando entraban en contacto con cualquier elemento. Por eso hija ahora que sé que la leucemia se está carcomiendo mi vida, te aconsejo que nunca más te sientas triste de quien eres porque esto que nos pasa a nosotros es la mayor bendición del mundo.-
- ¿Y si siento que no hay lugar en el que no parezca extraña qué puedo hacer? ¿Si miro a un lado y al otro y sólo me veo a mi misma haciéndome compañía qué hago?-
-Pues hija alégrate porque sabes que en el mundo está tu padre acompañándote y que de ahora en adelante lo va a estar por siempre cuidándote y amándote y más ahora que veo que tus ojos me demuestran tanta inocencia. Y otra cosa, descarga tus maletas, pues hoy eres un nuevo miembro de ésta casa-
- Entonces ¿no te incomoda tenerme aquí?-
- Por supuesto que ¡no!-
- Eres mi hija, mi nuevo y único amor pues tu madre dejó de serlo en el momento en que se fue a otro país sin explicarme nada. Me dejó solo y muy triste porque te digo la verdad, la amaba y era la única mujer con la que quería estar el resto de mi vida. Por eso nunca volví a intentar nada con nadie, ya no tenía sentido poner a vivir unos latidos que ya habían muerto. Pero ahora te veo y mira, toca. ¿Si lo sientes? –
- Si papá está muy acelerado tu corazón-
- Se llama amor y sentimiento puro y por eso puedo decir que acabo de encontrar a mi nuevo amor verdadero. ¿Me dejas lamerte?-
- Claro papá, sería lo menos que podría permitirte-
- Sabes a chocolates y frutas-
-Sí, es que me encanta el fondue y mi perfume es de frutas rojas-
Ese día Antonieta durmió muy tranquila en su nuevo hogar y con el paso del tiempo se fue acoplando a esta nueva cultura y estilo de vida que le dieron la oportunidad de volverse ella misma. Se sentía viva y libre y por fin tenía una identidad, lo mejor es que justo a una cuadra del edificio en donde quedaba la casa de su padre vendía el mismo fondue de chocolate que Antonieta compraba en Cali y por eso el encanto de Buenos Aires la mantuvo contenta por siempre al lado de su papá mientras estuvo vivo.

lunes, 11 de octubre de 2010

Reescritura Historia

Sigues siendo fiel a esa esencia que te hace ser, que te muestra las maravillas existentes entre un sabor y olor y te da la oportunidad de conocer más a fondo la esencia de cada ser y elemento que habita en el planeta. Antonieta ahora que te conozco y que se de tanta frustración que cargas en tu espalda te pido que no renuncies a ser quien eres porque las pequeñas particularidades son las que no hacen diferentes en el mundo y yo sé que hay muchos hombres que conocen tu belleza inmensa.

-Pero papá, no ha sido fácil vivir en un mundo donde no hay lugar para la diferencia-

-Lo sé hija, pero sé también si algún día tu madre logró amarme con la misma carencia que tienes tú, alguien podrá amarte a ti también.-

-¿A qué te refieres con eso? ¿A ti también te faltan dos sentidos?-

-No me faltan mi hijita linda, porque nunca me acostumbré a necesitarlos o extrañarlos. Sólo viví mi vida cada segundo saboreando cada olor, color, textura y aroma, disfrutando de la forma en que mis miles de papilas se balanceaban de un lado a otro y armaban una tremenda fiesta en mi boca cuando entraban en contacto con cualquier elemento. Por eso hija ahora que sé que la leucemia se está carcomiendo mi vida, te aconsejo que nunca más te sientas triste de quien eres porque este que nos pasa a nosotros es la mayor bendición del mundo.-

- ¿Y si siento que no hay lugar en el que no parezca extraña qué puedo hacer? ¿Si miro a un lado y al otro y solo me veo a mi misma haciéndome compañía que hago?-

-Pues hija alégrate porque sabes que en el mundo está tu padre acompañándote y que de ahora en adelante lo va a estar por siempre cuidándote y amándote y más ahora que veo que tus ojos me demuestran tanta inocencia. Y otra cosa no descargues tus maletas porque ya viene Gabriel a recogerte-

-¿Cómo sabes que Gabriel existe?-

-He tenido una conversación por teléfono con él justo antes de que entraras a mi cuarto-

-Hola Antonieta-

-Hola Gabriel. ¿Por qué has regresado a buscarme?-

-Porque desde ayer que me dijiste que no nos volveríamos a ver no he dejado ni un segundo en pensar en lo maravillosos momentos que vivimos juntos y quiero que te quedes conmigo aquí en Buenos Aires, así podrás visitar a tu padre, estudiarás lo que desees y viviremos juntos. Es que tu extraña pero atractiva mirada me sorprende y tu insensata costumbre de lamer todo me enloquece. Además recuerdas que buscaba una historia, pues que descubrí que mejor que escribirla es vivirla y a tu lado haríamos una historia jamás nunca antes vivida.-

Antonieta quedó fríamente anonadada. No entendía como Gabriel se había fijado en ella pero tampoco negaba que esa atracción repentina le generaba mucha curiosidad. Y como era su costumbre no quiso ni siquiera pensarlo dos veces, en Buenos Aires respiraba nuevos aires de libertad y ella quería quedarse allí para siempre con Gabriel.

Antonieta decidió visitar a su padre dos veces a la semana, después de ir a la escuela. Encontró un restaurante donde vendía un fondue de chocolate mejor del que comía en Cali y por fin después de muchos años se sintió parte de un lugar.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Mi historia


Hace tres meses empecé una historia de la cual hasta el momento saben algunas cosas de mi pero sin saber como soy o como me llamo, pues bien voy a empezar por el principio. Mi nombre es Samir pero para mis amigos soy el Chaval y en algunos casos el Tío dependiendo de cómo la gente me quiera decir, tengo 20 años, mido 1 metro con 81 centímetros, blanco, ojos color café claros, pelo color castaño, ondulado y corto. Me encanta la comida, beber y disfrutar el tiempo libre con las personas que conozco e incluso con las que voy a conocer. Pero debo aceptarlo, soy tímido cuando siento que no he podido entrar en confianza, entonces me demuestro muy callado y reservado. Por eso hay quienes me describen como serio, callado o hasta antipático, pues como no les hablo creen que yo me siento de mejor familia. Y les digo la verdad, es todo lo contrario, soy muy sencillo y honesto y no me pego de esas bobadas de las que viven algunas personas. Vivo con mi hermano y mi abuela y me encantan esos trozos de carne asada que ella me sirve todos los domingos al almuerzo. Es que esa salsita que suelta la carne cuando cae en el plato, me fascina, y su olor, tan sólo con imaginarlo ya me dio hasta hambre.


Por lo general soy muy solitario, paso mi tiempo libre viendo cine europeo y fumando cigarrillo con un buen café que nunca me abandona. Mi filme favorito es “Secretos del corazón” una historia de dos niños inocentes que tratan de descubrir los secretos que habitan en un cuarto oscuro en lo alto de la montaña. Su ingenuidad y misma curiosidad los hace llegar al fondo de esa rara habitación donde pueden escucharse las voces de los muertos. Ojala algún día un muerto me hablara y entonces yo le preguntaría cómo se encuentran mi mamá y papá. Ellos murieron hace varios años en un accidente de tránsito mientras volvían de la fiesta de cumpleaños de su mejor amigo Eduardo. No se imaginan cuánto los extraño. Desde ese entonces mi hermano siempre quiso estar a mi lado, me buscaba en las noches para que durmiéramos juntos pero desde hace un tiempo, ha dejado de hablarme, me ignora y a veces me observa en silencio, pero mientras lo hace, su cara me expresa cierto desprecio al cual no le encuentro ningún fundamento. Por eso decidí comprarme un loro verde con pecho rojo, un animal muy singular pero a la vez muy extravagante. Le enseñé palabras y pedazos de canciones, observa mis movimientos y me grita cuando sabe que son muy misteriosos porque le encanta darse cuenta de todo. Pasa la mayoría del tiempo al frente de la ventana de mi cuarto y tararea canciones antiguas. A veces conversa con mi vecino ciego y él piensa que mi loro Lorenzo es un niño que vive en mi casa y que apenas está aprendiendo a hablar porque siempre repite las mismas frases: “¿Comó se encuentra?”, “Mi nombre es Lorenzo”. Me paso horas enteras en mi cama recordando la forma tan seria en que el vecino le habla a mi loro, es muy chistoso.


Pienso que no hay nada mejor que tener un buen confidente al lado, una persona que se muestre tal y como es, alguien que escuche las palabras y sepa interpretarlas pero mejor que eso alguien que entienda sobre las diferencias que hay en el planeta. Hace varios años conocí una mujer que me cautivó con su mirada y sus labios intenté acercarme en varias ocasiones pero ella siempre me rechazó, ni siquiera quiso conocerme un poco o tan solo brindarme el saludo. Ella era delgada, de pelo castaño oscuro y unos ojos grandes y expresivos, pero su mayor defecto, no toleraba las diferencias. Y como yo siempre fui poco normal en el colegio porque no me gustaba estar gritando ni hablando, sólo opinaba cuando hablaban del espacio exterior, de las estrellas, de los planetas y meteoritos y terminaba mis frases expresando que deseaba que un muerto me hablara, entonces imagínense la cara de ella y el desprecio tan grande que siempre me brindó.